jueves, 8 de marzo de 2012

Silencio.

Los silencios callados me gustan , el silencio pausado , lento , el que de verdad reposa. El silencio que me hace caminar.

Los silencios que hablan , que cuentan , que dicen también me fascinan . Estos silencios dependen de su naturaleza trucada , espacio vacío de sonidos y de voces , en el que brotan significados , que parecen colocarse estratégicamente entre las personas .Tienen una naturaleza mágica , que me hace cosquillas entre las pestañas de mi vacilación …y parpadeo. En ese batir de titubeos , el silencio retiene mis palabras y las resguarda.

Tú haces que el silencio cobre vida y aparezca cuando le plazca . Tú , que no sabes todo lo que consigues , consigues que el silencio se convierta en un ritual sagrado.

Porque retumban , nuestros espacios sin voces en él.

El silencio de anoche hizo que tiritasen hasta las pestañas de mis ojos , aunque no se pudiera apreciar desde tan lejos , tampoco se hubiese podido desde tan cerca , Lo cierto es que mis ojos estaban repletos de emociones y palabras y si no hubiese sido , por la serenidad dorada que desprendíamos , las dos , se habrían desbordado .

A borbotones habría dicho todo lo que llevo dentro, sin embargo , todo quedó en un temblor interno , que se convertía en un zumbido a ratos. Todo quedo en uno de nuestros silencios . En un silencio suicida , un silencio que en mi quería morir , quería desintegrarse , un silencio retenido. Todo se reducía y se expandía continuamente , nunca hubo un descanso. Es que había tanto….

Empezaron a temblarme las piernas imperceptiblemente , siguiendo por mi vientre esas oleadas y corrientes que provocas en mi cuerpo. Mientras que mi mente colapsaba . colisionaban todos los pensamientos , todas las palabras , nacía una danza frenética e imparable. Y yo , yo , por encima y por delante de mi cuerpo y de mi mente , yo seguía sonriéndote , seguía mirándote , permanecía ahí contigo , mientras sentía como mi cuerpo y mi mente se disgregaban , perdían la forma , y se desbordaba todo el contenido , pero yo , permanecía delante , sosteniendo con una fuerza sobrehumana las palabras , en aquel silencio , en cada uno de nuestros silencios.

Tú, ladeando la cabeza , esos ojos que no me dejaban ni un momento , tu repertorio de sonrisas , tu dulzura , tus palabras que dejaban entrever ese cristal sin fondo , tu voz escuchándome , tu voz me escuchaba ,elegante inquiría más de mí y al hacerlo me escuchaba.

En silencio pude percibir nuestra entrega , mutua , pude percibir la misma intensidad latiente. Percibí los mismos colores que tenías tú …percibí tantas emociones a la vez , alongando todo mi ser , que creo haber crecido unos centímetros.